viernes, 6 de enero de 2012

¡"CODEARSE" CON CODERAS !



Luzcamos coderas, en medio de "la debacle" (galicismo por ruína, desastre) que estamos viviendo .
Si, la codera es "fashion" en prendas como cárdigans, jerséis, blazers o incluso vestidos.
Imperativo legal desde la cúpula más "top" del mundo de la moda.

¡Uf, menos mal!

Genialidades así son dignas de paraninfo. Sin duda, una lección magistral:

¡¡¡ "CODEARSE CON CODERAS" !!! Lo dicho, una genialidad.

Lo de este año sorprende. Se han vendido más prendas con coderas en estos primeros días de rebajas, me atrevo a decir, que en toda nuestra infancia.
Disculpen la hipérbole, y lo siento por aquellos/as que se las han comprado antes. ¡"La joía moda" es así, cuanto más fiel eres, peor te trata! ... a veces, mejor no saber a cuánto le salió la codera al de al lado y "codearte a gusto". Lo importante esta temporada es no dejarte las coderas en casa, "que no lucen na allí" y además: ¿"pakistán" entonces?
El año que viene, veremos qué pasa con las rodilleras. Todo se andará...

Lo digo por si las cosas no mejoran y en medio de esta crisis que cada vez nos obliga a "arrastrarnos" más, a nuestros queridos diseñadores, se les ocurre implantar: "la moda de las rodilleras" . Si esto sucediera o sucediese, cuenten conmigo por favor, pues las necesitaré irremediablemente para implorar mi plegaria diaria a "la virgen del codo retuerto":

"Virgencita, virgencita, que me quede como estoy".

Todos/as, luciendo rodilleras, en el 2013 ... ya no resultaría tan gracioso, si no cuanto menos, surrealista. Aunque de nuevo podría... TRISTEMENTE (Nocturno nº1 en B Minor. Chopin) ... , quedar reducido a una cuestión sólo estética.

Tal como se aprecia en la foto superior: la naturaleza sigue siendo generosa con nosotros (única en estética y diseño) pero los tiempos no acompañan. Parece que todo se cae, se desmorona, no sólo nuestra tan bien querida Torre de Hércules. Por desgracia unos simples andamios y alguna que otra reparación de urgencia no son suficientes para poner a nuestra sociedad a andar de nuevo.

Arrimar el hombro, poner los codos, en mi tiempo era sinónimo de esfuerzo. Contrariamente:
Codearse , era igual a saber relacionarse bien. No guardaba relación alguna con las coderas.
Por eso esta moda ahora me deja a mi ... no sé ... será una mezcla de esforzarse para codearse bien? Yo que sé, ni me importa. Cada uno con sus cadaunadas y por desgracia todos con la de todos. Este año toca: coderas.

Que ironías de la vida, en los 70, "mamá tiraba de la codera para tirar palante", vamos que no te quitabas la codera de encima. Ahora, no sé si para "tirar pa lante o no ", de lo que sí estoy segura es que "pa tirarlas el año que viene" fijo. Vamos que pagamos por "la codera" efímera y tan contentos. Ver para creer!!!
Eso sí, ahí estamos todos, codo con codo: codeándonos.

(Escucho ahora un fragmento de la Sinfonía en C menor BWV 21 de JS Bach. Bendita dignidad doméstica sin coderas. Lo que uno disfruta!)